En esta nota te contamos qué es Mastodon, sus características únicas y las similitudes que tiene con otras redes sociales.
Desde finales del 2022, todo el mundo habla de Mastodon. Esto se debe a distintas razones, entre ellas la llegada de Elon Musk a Twitter y las distintas políticas que la plataforma llevó adelante.
Pero, ¿qué es Mastodon?
Se trata de una red social de microblogging que, a efectos prácticos, es muy similar a Twitter: se pueden publicar textos de hasta quinientos caracteres, imágenes y videos (como también el uso de etiquetas y de menciones a otros usuarios). Cada publicación recibe el nombre de Toot (lo que en Twitter sería tweet) y se puede likear, comentar y compartir.
Mastodon surge en 2016 por iniciativa de Eugen Rochko, y su característica central es ser una red descentralizada. ¿Qué significa esto?
Para utilizar Mastodon, los usuarios pueden unirse a una de las muchas instancias que existen en Internet. Esto es: en lugar de haber un único sitio para registrarse (como por ejemplo, twitter.com), hay muchos, cada uno con sus propias políticas y definiciones acerca de qué tipo de contenido pueden compartir los usuarios. Sin embargo, cuando uno se une a una instancia de Mastodon, puede comunicarse con usuarios en otras instancias.
Es parecido a lo que sucede con el correo electrónico: uno puede crear una cuenta en Gmail, Outlook o Yahoo, y cada una de las compañías detrás de esos servicios ofrecerá sus propias características; pero todas utilizan el mismo protocolo estándar: SMTP. Gracias a ello, alguien que usa Gmail puede enviarle un mensaje a otra persona que tiene su cuenta en Outlook, o que se ha montado su propio servidor de correos con su propio dominio.
En Mastodon, ese protocolo estándar es ActivityPub. Y gracias a él, cualquier servidor corriendo una instancia de Mastodon puede interactuar con otras instancias, e incluso con otras plataformas que también utilizan el mismo protocolo (como Tumblr, o algunas instalaciones de Wordpress). Adicionalmente, cualquier usuario puede montar su propio servidor, con la ventaja de que tanto el protocolo como el software de base son de código abierto.
En síntesis: los usuarios pueden elegir cualquier instancia que quieran y unirse, sin que ello les impida interactuar con el resto de los usuarios en otros servidores. Existen, naturalmente, muchas instancias para elegir, tanto de propósito general como específicas. En este sitio se puede explorar un directorio para elegir la más adecuada.
Twitter vs. Mastodon
En octubre de 2022 Twitter cambió de manos. Si bien en el pasado la red social del pajarito había tenido controversias con respecto a las políticas de seguridad y libertad de expresión, la llegada de Elon Musk generó mucho revuelo.
Como resultado, algunos usuarios decidieron migrar a Mastodon. Visualmente se presentaba como una plataforma algo similar a Twitter, y varias de sus funciones eran ciertamente análogas.
Pero lo más importante fue que, a diferencia de las redes centralizadas, en Mastodon cada instancia puede tener sus propias reglas acerca de qué tipo de contenidos son aceptables y cuáles no. Al aplicarse localmente, cada instancia puede responder a las necesidades de diferentes grupos de personas, y los usuarios pueden unirse a un servidor que tenga políticas con las que estén de acuerdo.
Esa es una de las características que más atrajeron a quienes se sintieron disconformes con la llegada de Musk a Twitter y los cambios que desde entonces ha impulsado en la plataforma. El éxodo hacia Mastodon impulsó como nunca su crecimiento, que en diciembre de 2022 alcanzó un tope de dos millones y medio de nuevos usuarios al mes. Sin embargo, aún está muy lejos de ser una red social masiva.
Otra gran diferencia entre Twitter y Mastodon es la manera en que se financian. El modelo de negocios de Twitter se basa en la publicidad. Si la red no recibe anunciantes, no tiene forma de generar ingresos. Por su lado, Mastodon recibe financiamiento a través de crowdfunding; es decir, recibe aportes de los usuarios, de las personas en general o de otras organizaciones.
Debido a ello, Mastodon no tiene publicidad, y los datos de los usuarios no son utilizados de ninguna forma. Tampoco posee un algoritmo de personalización: las publicaciones se muestran en el feed de manera cronológica.
¿Por dónde empezar?
El sitio web joinmastodon.org es un gran punto de partida. No solo explica de manera sencilla y amigable cómo funciona la plataforma, sino que también ofrece un directorio de servidores en el que se puede encontrar una instancia según la región, el idioma o el tema que nos interesa.
Para casos de uso general, mastodon.social o mstdn.social son dos buenas elecciones. ¡Pero existen miles! La clave está en buscar una que sirva para empezar, y tomarse el tiempo de entender cómo funciona. También cabe aclarar que cada vez hay más tutoriales dando vueltas, como este de Patricio Contreras.
¡Adelante!
