La vidriera de tu negocio de repente puede aparecer en la avenida más transitada del mundo. Descubrí cómo aprovecharlo.
A partir del 10 de julio pasado, el contenido público de las cuentas profesionales de Instagram comenzó a ser indexado por Google. Esto significa que publicaciones, perfiles y reels de cuentas comerciales ahora pueden aparecer entre los resultados de búsqueda, lo que marca un antes y un después en la visibilidad de las marcas en internet.
Para los negocios, esta novedad representa una oportunidad valiosa, pero también plantea nuevos desafíos en términos de estrategia de contenidos, SEO y gestión de la reputación digital.
Hasta ahora, el contenido de Instagram era mayormente inaccesible para los motores de búsqueda. Si bien era posible encontrar perfiles o links específicos, los posts individuales no solían estar indexados.
A partir de este cambio, Google, Bing y otros buscadores tiene acceso a parte del contenido público de cuentas profesionales, lo que incluye el perfil, publicaciones en el feed y reels. Esto no solo mejora la presencia de las marcas en los buscadores, sino que también genera nuevas formas de descubrimiento orgánico para los usuarios.
Cuatro implicancias directas a tener en cuenta:
Este nuevo panorama ofrece múltiples oportunidades para quienes gestionan cuentas profesionales en Instagram, pero para poder capitalizarlo hay que mirar de cerca algunas cuestiones.
El primer paso es mirar con nuevos ojos el perfil: ahora que es más fácil que apareca en los resultados de Google, se convierte en una carta de presentación mucho más potente. Por eso conviene repensar la biografía y el nombre del usuario, incorporando palabras clave que describan claramente el rubro o la propuesta de valor.
Los textos de las publicaciones también cobran otro protagonismo. Aunque Instagram es, por naturaleza, una red visual, ahora resulta conveniente escribir copys que no solo conecten emocionalmente con la audiencia, sino que también contengan términos relevantes para buscadores. Lo mismo ocurre con los hashtags: combinar etiquetas populares con otras más específicas y georreferenciadas puede mejorar la visibilidad tanto dentro como fuera de la plataforma.
La frecuencia de publicación sigue siendo clave. Google valora la actividad y la frescura del contenido, por lo que mantener una agenda regular de publicaciones es una forma efectiva de aumentar las probabilidades de aparecer en las búsquedas. A esto se suma la importancia de incluir ubicaciones en los posteos, sobre todo para marcas con presencia local o que ofrecen servicios en zonas determinadas.
Finalmente, a tener en cuenta: con mayor visibilidad, también crece el riesgo de exposición negativa. Las marcas deberían, en ese sentido, ser cuidadosas y monitorizar menciones y comentarios con más frecuencia, responder rápidamente a críticas o consultas y verificar que la información del perfil esté actualizada y sea coherente con otros canales.
En resumen, aprovechar esta nueva integración implica pensar Instagram no solo como una red social, sino también como un nuevo protagonista del ecosistema de posicionamiento digital
En ese sentido, un perfil bien armado, contenido planificado con criterio y una mirada estratégica pueden marcar la diferencia en este nuevo escenario digital cada vez más interconectado.